Viendo que debido al post de ayer os habéis creído que todavía vivo en esa “petit maison” os voy a detallar mis humildes moradas a lo argo de mi corta vida…
La primera, de la que casi no me acuerdo ya que la dejamos cuando yo tenia 6 años, era una casa ni grande ni pequeña, normal pero solo tenia dos habitaciones y por lo visto se nos quedo pequeña, a mi me parecía estupenda pero claro yo solo tenia 6 años y todo me parecía estupendo por aquella época, de lo que si que me acuerdo es que teniamos un parque enfrente en el que nos tirábamos horas y horas jugando con el bocadillo de choped del cuadraó. Tenia un montón de amigos porque todos éramos de la misma edad y compartíamos todo, los mocos, las paperas, el sarampión, los cumpleaños, los payasos de la tele, verano azul… que tiempos aquellos de los que no me acuerdo de nada pero de los que a base de repetírmelo me he creado yo mi propia película.
Luego nos mudamos a otro piso mucho más grande, mi hermana tenia su habitación y yo la mía y como a mi me daba miedo dormir sola pues quería dormir con ella pero como ella no quería forro todas las paredes con posters de la serie V, de lagartos y bichos verdes comiéndose las ratas solo para que me diera miedo tambien entrar en su habitación (una joyita de hermana mayor, la verdad). Luego los cambio por los de lso Hombres-G, Rick Asley, Ole-Ole, Locomia!!!
Esa casa es tan grande y con un pasillo tan largo que nos ahorramos un pastón en gimnasios, la verdad. Lo malo de esa casa eran las camas, que eran tamaño Pin y Pon y además de las que se suben y se bajan, me pasaba toda la noche o con los pies fuera de la cama o con la almohada caída por el agujero, una infancia muy dura la verdad. 23 años me tiré diciendola a mi madre que me cambiara la cama y hasta el año pasado que apoco me rompo la cabeza (literalmente) cayendome de la cama no las cambió
Allí casi no tenia amigos porque todos eran más pequeños que yo. Mis vecinas de al lado eran de mi misma edad pero esas nunca han contado porque eran un poco raritas… Aún me acuerdo cuando me las encontraba los viernes por la noche cuando yo volvía a las 12 (cuando tenia toque de queda) medio pedo todavía y ellas salían a “tirar la basura” lo que habrán hablado de mi y lo bien que yo me lo he pasado mientras tanto….
Luego me fui a vivir sola… la de cosas que me pasaban y que yo creía que eran paranormales…. Fue una época de “auto-reconstrucción”. Vivía en el centro de Madrid, en un barrio que en su día había sido de lo mejorcito pero que ahora se había convertido en un gheto a compartir entre viejos (perdón, personas mayores) de mas de 150 años, moros (perdón, norte africanos), guachupinos (perdón, sudamericanos), chinos (los chinos son chinos no?) y yo.
Lo divertido era el patio en el que podías adivinar la semana astronómica que tocaba según los olores que fluyeran por el… nunca llegue a colgar la ropa allí por miedo a que los calcetines blancos aparecieran verdes.
Eran todos muy majos y los viejecillos me cogieron mucho cariño, a ver eran con la única que se entendían… Menos en verano cuando la bachata, el ballenato y el regueton se unían a los ronquidos del vecino de al lado. Allí estuve como 5 años. Hasta que un día de golpe y porrazo me tuve que ir, pero eso es otra historia de esas en las que la realidad supera a la ficción….
Un año y medio de prestao.
Luego 2 años más o menos en la morada anteriormente descrita. A mi no me costo nada, nada aparte de dinero claro, amueblarla, ponerle cortinas y abalorios, el menaje y demás ya lo tenia de antes así que en cuanto los cables se pusieron en su sitio pues lo coloque todo estupendamente, la casa era pa un anuncio, una pasada y la verdad es que me quedo súper chula, como me gustaba. Por fin tenia la casa que me gustaba y como a mi me gustaba y era mia…. Pero vamos, que en cuanto coloque el último cachivache en su sito tuve que meterlo de nuevo en su caja. Mudanza de nuevo.
En tres días me compre la que ahora es mi casa, solo mía y del banco lo próximos 34 años claro.
No es la más bonita del mundo, no es la más grande, no es la más nueva, no tendrá bañera, (el plato de ducha es más grande que de postre) pero es mía, y nadie me va a decir de la noche a la mañana que me tengo que ir, voy a estar ahí plantada hasta que me pueda compra una más grande y con más luz que es lo único que echo de menos….
Los principios fueron muy traumáticos aunque contados por mi y ahora desde la distancia son hasta divertidos, ya os lo contaré. Pero lo mejor de todo es cuando llego a casa después de un día de trabajo de morirse y consigo tirarme en mi mini sofá ( no había sitio para la chaise long) y miro mis muebles de IKEA (no había ni dinero ni espacio para los de teka de Malasia), miro mis cortinas del Leroy Merlin (no había ganas para que me las hicieran a medida) miro mi tele de plasma del Carrefour (que le den a la Sony Bravia de 1080, a la play 3 con Blue Ray y al 5.1 Yamaha que te cagas) Una sonrisa se pinta en mi cara y pienso todo esto es mío ( y del banco, claro) e inmediatamente después aparece la banda sonora de OT 1
ADELANTTEEEE!!!!
Viendo lo visto me veo capacitada para dar consejos sobre mudanzas, amueblaciones y decoraciones varias… lo que yo no se es como me quedan ganas de viajar todavía con lo que me he movido ya
La primera, de la que casi no me acuerdo ya que la dejamos cuando yo tenia 6 años, era una casa ni grande ni pequeña, normal pero solo tenia dos habitaciones y por lo visto se nos quedo pequeña, a mi me parecía estupenda pero claro yo solo tenia 6 años y todo me parecía estupendo por aquella época, de lo que si que me acuerdo es que teniamos un parque enfrente en el que nos tirábamos horas y horas jugando con el bocadillo de choped del cuadraó. Tenia un montón de amigos porque todos éramos de la misma edad y compartíamos todo, los mocos, las paperas, el sarampión, los cumpleaños, los payasos de la tele, verano azul… que tiempos aquellos de los que no me acuerdo de nada pero de los que a base de repetírmelo me he creado yo mi propia película.
Luego nos mudamos a otro piso mucho más grande, mi hermana tenia su habitación y yo la mía y como a mi me daba miedo dormir sola pues quería dormir con ella pero como ella no quería forro todas las paredes con posters de la serie V, de lagartos y bichos verdes comiéndose las ratas solo para que me diera miedo tambien entrar en su habitación (una joyita de hermana mayor, la verdad). Luego los cambio por los de lso Hombres-G, Rick Asley, Ole-Ole, Locomia!!!
Esa casa es tan grande y con un pasillo tan largo que nos ahorramos un pastón en gimnasios, la verdad. Lo malo de esa casa eran las camas, que eran tamaño Pin y Pon y además de las que se suben y se bajan, me pasaba toda la noche o con los pies fuera de la cama o con la almohada caída por el agujero, una infancia muy dura la verdad. 23 años me tiré diciendola a mi madre que me cambiara la cama y hasta el año pasado que apoco me rompo la cabeza (literalmente) cayendome de la cama no las cambió
Allí casi no tenia amigos porque todos eran más pequeños que yo. Mis vecinas de al lado eran de mi misma edad pero esas nunca han contado porque eran un poco raritas… Aún me acuerdo cuando me las encontraba los viernes por la noche cuando yo volvía a las 12 (cuando tenia toque de queda) medio pedo todavía y ellas salían a “tirar la basura” lo que habrán hablado de mi y lo bien que yo me lo he pasado mientras tanto….
Luego me fui a vivir sola… la de cosas que me pasaban y que yo creía que eran paranormales…. Fue una época de “auto-reconstrucción”. Vivía en el centro de Madrid, en un barrio que en su día había sido de lo mejorcito pero que ahora se había convertido en un gheto a compartir entre viejos (perdón, personas mayores) de mas de 150 años, moros (perdón, norte africanos), guachupinos (perdón, sudamericanos), chinos (los chinos son chinos no?) y yo.
Lo divertido era el patio en el que podías adivinar la semana astronómica que tocaba según los olores que fluyeran por el… nunca llegue a colgar la ropa allí por miedo a que los calcetines blancos aparecieran verdes.
Eran todos muy majos y los viejecillos me cogieron mucho cariño, a ver eran con la única que se entendían… Menos en verano cuando la bachata, el ballenato y el regueton se unían a los ronquidos del vecino de al lado. Allí estuve como 5 años. Hasta que un día de golpe y porrazo me tuve que ir, pero eso es otra historia de esas en las que la realidad supera a la ficción….
Un año y medio de prestao.
Luego 2 años más o menos en la morada anteriormente descrita. A mi no me costo nada, nada aparte de dinero claro, amueblarla, ponerle cortinas y abalorios, el menaje y demás ya lo tenia de antes así que en cuanto los cables se pusieron en su sitio pues lo coloque todo estupendamente, la casa era pa un anuncio, una pasada y la verdad es que me quedo súper chula, como me gustaba. Por fin tenia la casa que me gustaba y como a mi me gustaba y era mia…. Pero vamos, que en cuanto coloque el último cachivache en su sito tuve que meterlo de nuevo en su caja. Mudanza de nuevo.
En tres días me compre la que ahora es mi casa, solo mía y del banco lo próximos 34 años claro.
No es la más bonita del mundo, no es la más grande, no es la más nueva, no tendrá bañera, (el plato de ducha es más grande que de postre) pero es mía, y nadie me va a decir de la noche a la mañana que me tengo que ir, voy a estar ahí plantada hasta que me pueda compra una más grande y con más luz que es lo único que echo de menos….
Los principios fueron muy traumáticos aunque contados por mi y ahora desde la distancia son hasta divertidos, ya os lo contaré. Pero lo mejor de todo es cuando llego a casa después de un día de trabajo de morirse y consigo tirarme en mi mini sofá ( no había sitio para la chaise long) y miro mis muebles de IKEA (no había ni dinero ni espacio para los de teka de Malasia), miro mis cortinas del Leroy Merlin (no había ganas para que me las hicieran a medida) miro mi tele de plasma del Carrefour (que le den a la Sony Bravia de 1080, a la play 3 con Blue Ray y al 5.1 Yamaha que te cagas) Una sonrisa se pinta en mi cara y pienso todo esto es mío ( y del banco, claro) e inmediatamente después aparece la banda sonora de OT 1
ADELANTTEEEE!!!!
Viendo lo visto me veo capacitada para dar consejos sobre mudanzas, amueblaciones y decoraciones varias… lo que yo no se es como me quedan ganas de viajar todavía con lo que me he movido ya
3 comentarios:
Lo mejor de esta casa es eso, que entras dentro y la sientes completamente tuya.
Eso me pasó a mi. El día que se fueron los antiguos dueños, a los que ayudé con la mudanza por cierto, cuando entre en mi piso y cerré la puerta, estando tan vacío como estaba, yo me sentí orgulloso y contento, aquello que habia allí era sólo mio (bueno y del banco), pero nadie podría decirme haz esto o deja de hacer aquello.
Como diría algún graciosete: Te mueves más que los valores de la bolsa.
A disfrutar de la casa y que se joda el banco qeu sólo la va a poder disfrutar 34 años...
me mega encanto tu blog:d mañana vengo a comentar como se debe por que me dejan :d bye:d
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